30/01/2025
Probablemente hayas escuchado que las zanahorias son buenas para la vista, pero ¿qué pasa con los beneficios de otros alimentos? ¿Pueden ayudar los suplementos y las vitaminas?
¿Existe una dieta saludable que proteja la vista? La respuesta es tal vez. Los científicos creen que la falta de ciertos nutrientes, incluidas algunas vitaminas, carotenoides y grasas, puede ser una de las razones por las que la mácula y otras partes del ojo pueden comenzar a deteriorarse con la edad.
Aumentar la ingesta de estos nutrientes puede ayudar a proteger tus ojos de la degeneración macular relacionada con la edad y otras enfermedades oculares.
Para tener una alimentación saludable para los ojos no es necesario añadir alimentos poco habituales o poco apetitosos a la dieta diaria. Una dieta saludable y equilibrada es una dieta que también protege contra otras enfermedades graves, como las enfermedades cardíacas y la diabetes, y ayuda a mantener un peso saludable.
Los carotenoides son una familia de nutrientes que se encuentran en frutas y verduras de colores vivos. El cuerpo convierte algunos carotenoides en vitaminas; por ejemplo, el betacaroteno en vitamina A. Los nutrientes carotenoides están altamente concentrados en la retina del ojo y, a menudo, se reducen significativamente cuando la mácula comienza a deteriorarse.
Muchos carotenoides tienen propiedades antioxidantes. El cuerpo (y los ojos) utilizan los antioxidantes para combatir las moléculas inestables del torrente sanguíneo, llamadas radicales libres. Los radicales libres desempeñan una serie de funciones útiles en el cuerpo, pero un exceso puede dañar las células normales en un proceso llamado oxidación. Se cree que la oxidación desempeña un papel en el desarrollo de enfermedades oculares como la degeneración macular, el glaucoma y las cataratas.
Cada vez hay más pruebas que indican que la luteína y la zeaxantina pueden desempeñar un papel importante en la prevención y reducción de las cataratas y la degeneración macular relacionada con la edad. Estos dos carotenoides, que se encuentran en gran concentración en la mácula, parecen filtrar la radiación dañina de la luz solar. Ambos son también potentes antioxidantes que protegen los ojos contra la oxidación.
La luteína y la zeaxantina se encuentran en niveles altos en las verduras de hojas verdes oscuras y las hierbas, entre ellas, la espinaca, la acelga, el berro y el perejil. La luteína y la zeaxantina también están presentes en los pimientos morrones anaranjados y las yemas de huevo.
Los beneficios de otros antioxidantes para la salud ocular no están tan claros. Los estudios sobre el betacaroteno, la vitamina C, el licopeno (presente en los tomates) y la criptoxantina (presente en la palta y en el mango) han arrojado resultados dispares. Se necesitan más investigaciones para establecer una relación clara entre estos nutrientes y la prevención de enfermedades oculares.
Aunque no todas las pruebas son concluyentes, incluir una amplia variedad de frutas y verduras en la dieta es una excelente manera de promover la buena salud ocular. También es bueno para la salud general. Tratá de comer al menos cinco porciones de frutas y verduras cada día.
Cuanto más amplia sea la variedad, mejor. Las frutas y verduras más coloridas (amarillas, naranjas, rojas, azules y verdes oscuras) contienen nutrientes que se concentran en mayor cantidad en los ojos. Pero esto no significa que sean las únicas que debamos comer. La mayoría de los productos frescos son beneficiosos para la salud.
Una retina sana contiene una alta concentración de ácidos grasos omega-3. Los estudios demuestran que una dieta rica en pescado y ácidos grasos omega-3 puede reducir el riesgo de degeneración macular avanzada. Podés encontrar ácidos grasos omega-3 en ciertas variedades de pescado, como el salmón, el atún y el arenque. Los ácidos grasos omega-3 también se pueden encontrar en cantidades menores en la linaza, las semillas de chía, las nueces y el aceite de canola.
Si seguís una dieta equilibrada, tus ojos deberían recibir todos los nutrientes que necesitan. Está bien tomar un suplemento diario de vitaminas y minerales, pero los suplementos no sustituyen a una dieta saludable.
Los estudios demuestran que ciertas combinaciones de vitaminas y minerales pueden retrasar el avance de un trastorno ocular, pero no parecen tener ningún efecto preventivo. Si tomás suplementos diarios, no superes el 100 % del valor diario de cada sustancia, a menos que tu médico te indique lo contrario.
Preservar la vista y reducir el riesgo de enfermedades oculares no se logra de la noche a la mañana. Pueden pasar años antes de que veas resultados positivos. Pero además de los beneficios para la vista, adoptar estos hábitos saludables puede contribuir en gran medida a mejorar tu salud general y tu calidad de vida.
Fuente: Mayo Clinic.
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